Ruta por Irlanda en 7 días

Mi ruta por Irlanda comienza después de mucho tiempo queriendo conocer más de este hermoso país. Ya había estado en varias ocasiones en Dublín, había visitado lugares muy lindos cerquita de la ciudad. Aunque siempre lo que más me había interesado conocer era su interior, sus paisajes y su naturaleza. Pero irónicamente siempre terminaba estando la mayor parte del tiempo en su capital, en la ciudad, llena de gente y movimiento.

Finalmente decidí emprender un viaje por todo Irlanda y también Irlanda del norte ya que no conocía absolutamente nada de este país y tenia mucha curiosidad.

Nuestra ruta comienza en Dublín, Irlanda y finaliza en Belfast, Irlanda del norte. En un primer momento no sabía si hacer una ruta circular para poder entregar el auto en el mismo sitio donde lo habia buscado. Pero al final decidí que no, porque el precio no cambiaba demasiado. Así que buscamos el auto en Dublín y lo devolvimos en Belfast. Aunque tiempo después nos llevamos una sorpresa no grata por este detalle que contaré más adelante.

Cabe destacar que viajamos en noviembre así que los días son mas cortos, menos horas de luz y clima poco agradable, más allá que no existe el clima perfecto en Irlanda en ninguna época. Pero bueno de cualquier manera notarás la diferencia viajando en pleno verano que en los meses mas fríos.

– Primer día de la ruta por Irlanda: Llegamos al aeropuerto de Dublín y como nuestro roadtrip empezaba al día siguiente habíamos decidido que el auto lo íbamos a retirar al día siguiente, ya que si no era un día de alquiler de auto que no íbamos a aprovechar. Dublín es una ciudad que se puede recorrer perfectamente caminando. El único problema era que teníamos que volver nuevamente al aeropuerto ya que no había opción de buscarlo en algún punto de la ciudad.

Nos tomamos el bus y nos dejó en el centro de Dublín, en la famosa calle O’Connell Street, de ahí estábamos bastante cerquita del hotel así que estuvo bien. Hacía mucho tiempo que no iba a Dublín o mejor dicho había estado allí muchísimos años atrás por lo que había muchas cosas de la ciudad que había olvidado completamente.

Por ejemplo, recuerdo que el clima era muy malo, lluvia, viento, casi siempre fresco o frio, días nublados, no solo que me acordaba de esas cosas, sino que siempre alguien te las recuerda. Pero al estar ahí me di cuenta de lo lejano que estaba mi recuerdo comparando con la realidad, que era muchísimo peor. No quiero exagerar, pero ese día fue una pesadilla. Un viento super fuerte mucho peor que cualquier recuerdo que podía tener y mucho frío. Sí, Irlanda es un país que no tiene temperaturas extremas ni en verano ni en invierno, es muy raro que las temperaturas en invierno sean bajo cero. En general varían de 2 a 8 grados. Pero ese viento tan frio era mucho peor que cualquier lugar en el que haya estado soportando temperaturas de -5° o mas frías. Nunca lo había sufrido tanto ni recordaba que era así.

Pero bueno bancamos todo lo que pudimos ese viento congelado y recorrimos al menos los puntos más importantes como son el Trinity College, The Spire, la Catedral de San Patricio, caminamos por The Temple Bar, y algunos parques. Si te interesa ver todos los lugares que tiene Dublín para visitar entonces hace click aquí.

Terminando el día nos fuimos a comer unas papas fritas y a tomar una pinta, infaltable si estas en Dublín, no te lo podés perder. Y teníamos ganas de seguir recorriendo bares y disfrutar más de la noche, pero el frio nos venció así que decidimos volver al hotel y quedarme un par de horas pegada al calefactor y dormir.

– Día 2: Acá empieza oficialmente el roadtrip por lo que tenemos que volver al aeropuerto nuevamente, esta era la peor parte, pero bueno por suerte los buses no son tan caros y esta muy bien comunicado, el trayecto tampoco es extenso. Así que después de desayunar partimos hacía la famosa calle O’Connell Street tomamos el bus al aeropuerto y buscamos el auto.

Nuestra ruta era hacía Galway, Irlanda que se encuentra a 207 kilómetros de Dublín, ya que habíamos decidido para dos noches allí como base para visitar otros lugares. En el camino teníamos que desviar un poco ya que queríamos visitar el Monasterio de Glendalough que esta a 54 kilómetros de Dublín y el cual vale mucho la pena.

Después seguimos nuestro camino hacia la siguiente parada que era la Abadía de Clonmacnoise, yacimiento religioso paleocristiano muy interesante para conocer. Pero antes hicimos una parada en un supermercado para comprarnos algo para comer. Fuimos bastante económicas en todo el viaje con la comida ya que solo nos compramos pan, unas papitas fritas y encontramos unos quesos veganos así que genial. Llegamos al yacimiento con el tiempo justo ya que oscurece mas temprano en esa fecha. Pudimos aprovechar muy bien la visita y luego partimos ya que aún teníamos 80 kilómetros hacía Galway.

Al llegar a Galway nos fuimos directo al hotel, dejamos las cosas y luego recorrimos un poquito en auto y buscamos un pub donde pudiéramos comer. Para muchos Galway es lo más típico irlandés, por eso también estaba interesada en pasar por acá, aparte de que nunca había estado y la había escuchado nombrar muchísimas veces.

– Tercer día: nos despertamos temprano, como casi siempre, ya que los días eran cortos por lo que no quedaba otra opción para poder aprovechar y ver todo lo que teníamos planeado. En este día uno de los lugares que teníamos planeado visitar era el Castillo de Doonagore que se encuentra a 70 kilómetros de Galway. Las vistas que hay en este lugar son preciosas, es hermoso el castillo con todo ese fondo detrás. Mas allá que no se puede ingresar es posible verlo desde distintas calles y tomar fotos, vale mucho la pena.

El siguiente lugar para visitar eran los Acantilados de Moher, lugar super conocido, estaba solo a 6 kilómetros del Castillo de Doonagore. Lugar muy impresionante sobre todo para la gente que nunca vio un acantilado. Tengan en cuenta que si visitan este lugar deberán pagar por el estacionamiento.

Este día no lo teníamos muy cargado porque queríamos aprovechar también a visitar lugares en Galway. Conocimos su plaza principal, su Catedral, recorrimos la calle Shop Street donde podés ver muchas tabernas y pubs típicos, etc.

Por la noche nos fuimos a comer a un Burger ya que tienen muchas opciones veganas también por lo que era ideal para nosotras. Y después a dormir.

Día 4: En nuestro cuarto día tocaba empacar de nuevo las cosas y partir camino hacía un nuevo destino, en este caso Derry que está a 281 kilómetros de Galway y que ya no es parte de Irlanda si no de Irlanda del norte. Teníamos planeado en el camino visitar el Parque Nacional de Connemara. Realmente hace mucho tiempo que quería conocerlo. Antes hicimos una parada en la famosa Abadía de Kylemore. Luego visitamos varios lugares: Letterfrack que es la puerta de entrada al parque y se puede iniciar todo el recorrido por acá, lugares como Clifden que es la población más grande de Connemara, Diamon Hill con muy lindas vistas, Twelve Bens sobre todo para los amantes del trekking y los Fiordos de Killary.

Ya bastante tarde finalmente llegamos a Londonderry (Derry) nuestro alojamiento era con entrada autónoma a través de un código que te pasaban por mensaje, pero el problema fue que nos olvidamos de anotarlo en un papel y al llegar estábamos sin batería, sin enchufe donde cargar el teléfono, y finalmente nos salvó de casualidad una persona que estaba por el lugar. Así que dejamos todas las cosas, nos fuimos al super, y tuvimos una cena rápida en el alojamiento, ya que no queríamos acostarnos tarde para empezar bien temprano al otro día.

Día 5: El quinto día de nuestra ruta por Irlanda lo empezamos desayunando en una cafetería y visitamos la ciudad algunas horas para luego partir hacía el Templo Mussenden. Acá tenes la opción de subir hasta el Templo o simplemente ir a la playa y verlo a lo lejos. Supongo que dependerá de si te sobra tiempo o estas justo. El Templo se encuentra a unos 45 kilómetros de Derry.

El siguiente punto a vistar era The Dark Hedges. Que se encuentra a 35 kilometros del punto anterior. Seguramente cualquiera que haya visto la serie Juego de Tronos conocerá este lugar. No era mi caso ya que nunca ví la serie, al menos hasta el momento, pero si me parecía un lugar muy curioso y hermoso para visitarlo.

A 18 kilómetros del lugar anterior se encuentra la Calzada del gigante, lugar emblemático de Irlanda del norte y uno de los imprescindibles que no te puede faltar en tu viaje.

Ya en el final de este día tenemos Dunluce Castle que se encuentra solo a 7 kilómetros de la Calzada del gigante. Aprovechamos a visitarlo, es muy lindo también el paisaje que hay aquí.

Volvimos a Derry y aprovechamos para pasear y cenar en alguno de sus pubs típicos.

Sexto día: Emprendimos la ruta hacía Belfast. En este día teníamos que devolver el auto ya que íbamos a parar allí dos días por lo que no íbamos a necesitarlo más. También teníamos que ir hasta el aeropuerto ya que al reservarlo era la única opción que te daba. Obviamente antes fuimos al hotel y dejamos las cosas para no estar llevando peso en el bus.

Belfast es una ciudad que me gustó muchísimo, más allá del clima que resultó ser peor que el de Dublín ya que llovió mucho.

Aprovechamos a visitar lugares como el Ayuntamiento, el peace wall, Queens University, y muchos sitios más. Podés chusmear aquí todos los imprescindibles que ver en Belfast.

Nos fuimos a un pub típico a tomar cerveza y comer algo. Y dimos por finalizado nuestro día.

Día 7: Nuestro último día entero de la ruta por Irlanda. Aprovechamos para visitar un pendiente también de hacía mucho tiempo. Este era el Museo del Titanic. Tenía muchas muchas ganas de visitarlo. Pero a pesar de que me gustó mucho esperaba más. Uno de los problemas que noté con el lugar es que no limitan la cantidad de gente que entra y se hace muy difícil ponerte a leer todo y mirar si hay mucha gente amontonada que siempre esta tapando los carteles. Eso realmente te marca una diferencia grande en el resultado de toda la experiencia. Sobre todo, al leer en un idioma que no es el tuyo, a mi me costaba mucho concentrarme y llegar a leer completas las cosas.

Al salir estaba lloviendo, pero por suerte no tan fuerte. De cualquier manera, teníamos hambre y decidimos parar en un bar que estaba muy cerquita del museo. Nos comimos unos sandwichs y continuamos nuestra caminata por toda la ciudad. Seguimos visitando lugares y por la noche terminamos de nuevo en un pub, como no podía ser de otra manera.

Cuando volvimos al hotel empezamos a empacar las cosas ya que al otro día temprano salía nuestro vuelo.

Último día de mi ruta por Irlanda: Nos tuvimos que despertar mucho más temprano que cualquier otro día ya que nuestro vuelo era temprano por la mañana sumado a que hay que ir un par de horas antes. Teníamos que caminar hasta la estación de colectivo para tomar el bus al aeropuerto. Estabamos a unos 20 minutos de la estación, pero llovía con todo. Mi campera evidentemente impermeable no era y terminé empapada, pero como nunca. Se me mojó no solo la campera sino también todo lo que tenia debajo, también el calzado, las medias, todo. Fue super incomodo viajar así, pero me la tuve que aguantar. Así que al llegar al aeropuerto solo nos quedó esperar pacientemente el vuelo.

¿Dónde me hospedé durante mi ruta por Irlanda?

Bueno mencionaré aquí todos los sitios donde estuve alojándome, dando mi opinión sincera de cada lugar.

– Alojamiento en Dublín: era un alojamiento sencillo, nada de lujos, pero cumplía su función. Estaba limpio, era cómodo y contaba con hervidor eléctrico para hacerte café así que eso era un plus. Se llamaba Lyndon Guesthouse y el precio para una noche para dos personas era de 95,61 euros. Hay que tener en cuenta que los precios en Dublín son bastante elevados.

– Alojamiento en Galway: en Galway paramos en The Nest Boutique Hostel. El precio por dos noches para dos personas fue de 160,20 euros. Este hostel tenía habitaciones privadas con baño privado. Me gustó mucho porque estaba super limpio, era moderno, tenia todo lo necesario. Algo a destacar es que al menos en la habitación que estuvimos no tenía TV, obviamente que si uno viaja no va a estar viendo la televisión, pero al menos en mi caso me gusta para que haya ruido de fondo y no esté todo en silencio.

Y otra cosa a mencionar que en mi caso me pareció horrible es que la ducha no es como una ducha normal. Si no que tenés que presionar el botón cada 30 segundos aproximadamente para que el agua continue saliendo. Si no lo presionas el agua se corta. Imagínate que si demoras unos 15 minutos en bañarte te volves tonto apretando el botoncito cada ratito. Es como si te quisieran obligar a ahorrar agua y todo bien, pero yo ya ahorro agua, no consumiendo animales ya se ahorra el promedio de lo que gasta una ducha abierta todo el año. Aparte de eso siempre intento cuidar y no malgastar, pero déjame bañarme tranquila y demorar el tiempo que quiero.

– Alojamiento en Derry: Paramos en Elagh View Bed & Breakfast. El precio por dos noches para dos personas fue de 103,10 libras. Teníamos habitación privada con baño privado. Me pareció muy lindo el lugar, era como una casa con habitaciones. Tenía tv, hervidor eléctrico y todo para hacerte café.

– Alojamiento en Belfast: Este era el lugar más lindo en el que nos alojamos en este viaje. Se llamaba The Warren Belfast pagamos por dos noches mas o menos 213 dólares. Era como un hotel boutique chico, dividido en varios pisos, tenía un estilo clásico y todo estaba en perfectas condiciones, todo super pintoresco. Contaba con hervidor eléctrico.